La hiperhidrosis es el término médico para la sudoración excesiva. Las personas que padecen de hiperhidrosis pueden sufrir de un deterioro en su vida social y laboral, y ya que no es una condición temporal, muchas personas pasan años con esta incómoda situación.
Lo habitual es que la sudoración sea constante, independiente del clima, provocando humedad constante que mancha la ropa, manos húmedas, pies húmedos con mal olor, entre otras. Todo esto lleva a que muchas personas sufran de aislamiento y hasta problemas de ansiedad y depresión por la vergüenza que pueden sufrir por la hiperhidrosis.
Existen distintos tratamientos para la hiperhidrosis, y dentro de ellos, el más rápido, fácil y eficaz es la aplicación de bótox en la zona afectada. Este tratamiento logra disminuir en gran medida la sudoración excesiva.
El tratamiento consiste en inyectar el bótox en las áreas afectadas, lo cual inhibirá la acción de las glándulas productoras de sudor. Generalmente se aprecia una mejoría significativa a la semana. Se estima que el efecto dura alrededor de 6-8 meses, aproximadamente, y depende mucho de persona a persona.
